Debido a la reducción de disponibilidad de granos en el stock exportable, su envío a mercados internacionales sufre una caída consecutiva, siendo setiembre del 2019 el más crítico con una disminución del 16,2%, con relación a los primeros nueve meses del 2018.
Entre enero y agosto, Paraguay exportaba mensualmente en promedio 550.000 toneladas de la oleaginosa, pero en setiembre la cifra cayó abruptamente a 135.723 toneladas.
Asimismo, de acuerdo con el informe de comercio exterior de la Cámara Paraguaya de Exportadores y Comercializadores de Cereales y Oleaginosas (Capeco), en los últimos nueve meses se enviaron 4.649.300 toneladas, por debajo de las 5.549.300 que se lograron en el mismo periodo del año pasado, representado una caída del 16,2%.
Este comportamiento depende directamente de la producción, que en la campaña 2018/2019 sufrió una reducción de 24%, según la asesora del gremio de los agroempresarios, Sonia Tomassone.
“La cadena de valor de soja, ante la escasa oferta exportable de la oleaginosa, sufre una agudizada falta de dinamismo que, en su conjunto, afecta a toda la economía nacional”, refiere al respecto la Cámara de Exportadores de la materia prima.
En ese periodo, la siembra se extendió a 2.850.000 hectáreas, que a su vez repercutió directamente en una menor producción. Para la campaña 2019/2020 se mantiene la expectativa de 3.500.000 hectáreas, pero llegar a la meta depende de las lluvias.
Se espera que con la humedad de las últimas precipitaciones, en un par de días se complete la plantación en un 80%.
En cuanto a los destinos del principal rubro agrícola de exportación, Argentina encabeza la lista en un 70%, seguida de Rusia con un 26%.
El mercado más pequeño está conformado por Turquía, Líbano, Perú, Egipto, Bangladesh, Uruguay, Japón y Sri Lanka, que suman un 2% de participación.
Una esperanza para los agroempresarios es la suba de la cotización de los granos en el mercado internacional. En un mes subió 33%, con USD 356 por tonelada de la materia prima.
Los productores esperan que siga la tendencia a la suba, pero que también se abran más mercados.
Los agroganaderos están pendientes de las negociaciones para la exportación a China, uno de los principales compradores de granos, pero que impone como condición romper las relaciones con Taiwán.
“Desde el MAG haremos todas las gestiones para que los productores e industriales puedan exportar alimentos y otros rubros al gigante mercado de China Continental”, tuiteó al respecto el fin de semana el ministro de Agricultura y Ganadería, Rodolfo Friedmann.
El secretario de Estado había insistido en que las conversaciones las realizará solo en el ámbito comercial, mientras que para algunos gremios la vía para avanzar en un acuerdo es la diplomática.
ÚH
