El Instituto de Previsión Social enfrenta un panorama desafiante en la gestión de sus activos inmobiliarios, donde 776 propiedades destinadas a renta apenas logran un rendimiento anual del 0,59%, muy por debajo de las expectativas para un fondo previsional. Esta situación contrasta con los avances registrados en la formalización laboral, donde la alianza estratégica con la Dirección Nacional de Ingresos Tributarios ha permitido incorporar cerca de 17.000 nuevas empresas al sistema de seguridad social.
Patrimonio inmobiliario subutilizado compromete rentabilidad del fondo común
La cartera de inmuebles de renta del IPS presenta cifras que evidencian una gestión deficiente de recursos cruciales para el sistema previsional paraguayo. Con un valor contable de G. 1,9 billones (equivalente a USD 270 millones al tipo de cambio de G. 7.300), estas propiedades generan ingresos mensuales promedio de apenas G. 1.026 millones por concepto de arrendamiento.
El rendimiento actual del 0,59% anual representa una caída significativa respecto al periodo anterior, cuando alcanzaba el 1,04%. Esta disminución resulta particularmente preocupante considerando que las inversiones inmobiliarias representan el 10% del portafolio total de activos del Fondo Común de Jubilaciones y Pensiones.
La proyección para fin de año indica que estos inmuebles generarán únicamente USD 1,6 millones en ganancias, una cifra que pone en evidencia la ineficiencia en el aprovechamiento de un patrimonio millonario. Aunque se observa una mejora respecto a mayo de 2024, cuando el canon ascendía a G. 727 millones mensuales, el incremento resulta insuficiente para optimizar la rentabilidad esperada.
Auditoría revela magnitud del problema: 743 inmuebles improductivos
Una auditoría realizada por la Contraloría General de la República durante 2022 y 2023 expuso la dimensión real del problema, identificando 743 inmuebles que no generaban renta alguna. De estos, 469 propiedades clasificadas como «Improductivos disponibles» representaban un valor de G. 249.909 millones al cierre de 2023, mientras que 274 inmuebles bajo «Ocupación precaria no disponible» sumaban G. 293.613 millones adicionales.
Esta situación de ociosidad inmobiliaria se arrastra desde hace años, generando críticas constantes sobre la falta de eficiencia en el manejo de activos estratégicos del sistema previsional. Ante esta realidad, el IPS anunció la intención de desarrollar un nuevo proyecto de reglamentación para alquileres a través del Comité de Política de Inversiones, buscando optimizar la rentabilidad mediante convocatorias públicas.
Restricciones legales limitan opciones de optimización patrimonial
La normativa vigente impide al IPS vender estos inmuebles por formar parte de las reservas institucionales, requiriéndose una ley especial para disponer de las propiedades. Actualmente no se conocen proyectos legislativos en desarrollo para modificar esta situación, lo que perpetúa el problema de baja rentabilidad.
Especialistas señalan que una eventual venta de inmuebles improductivos y la colocación de esos recursos en inversiones financieras podría generar rendimientos cercanos al 7%, muy superiores al actual 0,59%. Esta diferencia representa una oportunidad perdida significativa para fortalecer la sostenibilidad del sistema previsional paraguayo.
Fondo Común muestra recuperación tras años críticos
El análisis del rendimiento del Fondo Común de Jubilaciones y Pensiones revela un panorama de recuperación después de atravesar períodos complejos. En 2020 y 2021, el fondo mantuvo rentabilidades reales positivas del 5,71% y 5,33% respectivamente, beneficiándose de un entorno inflacionario favorable.
Sin embargo, 2022 y 2023 presentaron desafíos importantes. En 2022, pese al crecimiento de los recursos administrados a G. 13,677 billones, la rentabilidad real se redujo drásticamente al 1,92% debido a una inflación del 6,8%. La situación se agudizó en 2023, cuando la rentabilidad real se desplomó al 0,92%, resultado de una inflación del 8,1% que superó el rendimiento nominal del 9,02%.
La recuperación comenzó en 2024, con fondos que alcanzaron G. 14,766 billones y una rentabilidad real del 4,96%. Esta tendencia positiva se consolidó en 2025, donde los recursos administrados treparon a G. 15,759 billones, logrando una rentabilidad real del 5,18% gracias a una tasa nominal del 8,98% frente a una inflación controlada del 3,8%.
Cruzamiento de datos impulsa formalización laboral
Paralelamente a los desafíos inmobiliarios, el IPS ha logrado avances significativos en la formalización laboral mediante el acuerdo estratégico con la DNIT para el cruzamiento de información tributaria. Entre mayo de 2024 y julio de 2025, se han formalizado 16.796 nuevas empresas patronales, representando un paso importante en la lucha contra la evasión.
Esta cifra cobra relevancia al considerar que en mayo de 2024 existían aproximadamente 650.000 empresas operando bajo normativas tributarias, mientras que solo 65.000 estaban inscriptas en el IPS. La evasión patronal rondaba el 90%, porcentaje que ha comenzado a reducirse, aunque de manera gradual.
Los datos de la DNIT confirman el crecimiento del universo tributario: de 650.491 contribuyentes activos en 2023, la cifra creció a 688.786 en 2024 y alcanzó 714.315 empresas al cierre de julio de 2025, evidenciando una dinámica económica en expansión que requiere mayor formalización previsional.
Sectores críticos mantienen altos niveles de informalidad
La estrategia de cruzamiento de información ha permitido identificar los sectores con mayor resistencia a la formalización. Los comercios al por mayor y menor, servicios prestados al público, construcción, transporte, hoteles, bares y restaurantes encabezan la lista de actividades con mayor evasión patronal.
Según datos del Instituto Nacional de Estadística, la ocupación informal pasó del 64,1% en 2017 al 62,5% en 2024, representando una reducción de apenas 1,6 puntos porcentuales en siete años. La construcción mantiene niveles críticos, descendiendo del 88,1% al 85% de informalidad, mientras que el comercio redujo su tasa del 69,9% al 66,7% en el mismo período.
Impacto fiscal y competencia desleal agravan el panorama
La evasión patronal genera efectos múltiples en la economía nacional. Por un lado, crea competencia desleal entre empresas formales e informales, sobrecargando a quienes cumplen con sus obligaciones legales. Por otro, reduce significativamente los aportes tanto a la seguridad social como al fisco, limitando la capacidad estatal de inversión en servicios esenciales.
Esta dinámica establece un círculo vicioso donde menores aportes resultan en menor capacidad de inversión en salud y jubilaciones, erosionando la confianza ciudadana en el sistema y reforzando la percepción de que no vale la pena contribuir formalmente.
Desafíos futuros requieren estrategia integral
El IPS enfrenta un doble desafío: consolidar los avances en formalización mientras resuelve la crisis de rentabilidad inmobiliaria. La experiencia internacional demuestra que la formalización exitosa requiere no solo controles más estrictos sino también incentivos claros como simplificación de trámites, reducción de costos iniciales y campañas de concienciación sobre los beneficios de la cobertura social.
Para Paraguay, el equilibrio está en fortalecer la fiscalización sin asfixiar a micro y pequeñas empresas que operan con márgenes reducidos. La articulación entre IPS y DNIT se perfila como herramienta clave para avanzar hacia un mercado laboral más transparente, donde la protección social deje de ser excepción para convertirse en norma efectiva.
La sostenibilidad del sistema previsional paraguayo dependerá de la capacidad institucional para resolver simultáneamente la ineficiencia inmobiliaria y consolidar la formalización laboral, asegurando recursos suficientes para las futuras generaciones de jubilados.