Según un informe de la revista Forbes, la industria de vehículos eléctricos chinos se está convirtiendo en un fuerte competidor para las marcas europeas y estadounidenses.
El gigante asiático está ofreciendo soluciones eléctricas competitivas y especificaciones cercanas a las de los vehículos de las marcas europeas a un precio más bajo.
El modelo Xpeng P7 es un fuerte rival para el Tesla Model 3, que puede acelerar de 0 a 100 kilómetros por hora en 4,3 segundos, y el sedán de lujo BYD Han, cuya opción de alto rendimiento permite llegar a los 100 kilómetros por hora en 3,9 segundos.
El fabricante chino BYD Auto ya está vendiendo coches eléctricos en EE.UU., entre ellos el e6, un monovolumen de cinco puestos para uso en el transporte de pasajeros, y un camión de basura que presta servicio en California.
El abanico de precios de los eléctricos chinos es amplio: desde el hipercoche EP9 de 3,1 millones de dólares, del cual solo existen seis unidades, hasta opciones sencillas como el EX5, de alrededor de 20.000 dólares. Este último está equipado con un motor de 160 kilovatios, la misma potencia de modelos de línea alta como el Nissan Leaf, que cuesta 39.0000 dólares.
En el Reino Unido, el coche eléctrico de mejor valor es el MG ZS EV, fabricado por la china SAIC, por un valor de 32.000 dólares.
“Si fuera un mercado libre puro basado en la relación calidad-precio, los autos eléctricos chinos ya estarían dando noches de insomnio a los fabricantes europeos y estadounidenses. Pero es probable que la política y el proteccionismo económico los mantengan a raya por un tiempo”, concluye el informe.