El gigante asiático se recuperó y presentó un crecimiento de 11,5% en el segundo trimestre después de haber caído 10% en el primer trimestre del 2020, según Europa Press.
Esta recuperación económica de una de las grandes economías del mundo se debe a la capacidad de contención del virus y a su flexibilización de la política fiscal y monetaria.
«La economía de China ha protagonizado un repunte notablemente rápido que, hasta ahora, ha sido en gran medida en forma de V. La recuperación inevitablemente se ralentizará durante la segunda mitad del año ahora que el impulso inicial de la reapertura ha pasado. Creemos que el PIB volverá a su tendencia anterior al virus para fines de año, más rápido que en cualquier otra gran economía», destacó Julian Evans-Pritchard, analista de Caìtal Economics.
Tommy Wu, Oxford Economics, expresó su confianza en que la recuperación de la economía de China continúe en el segundo semestre, respaldada por la mayor confianza sobre la contención del virus y una importante flexibilización de la política fiscal y monetaria.
«Los sólidos datos del PIB implican un sesgo al alza para nuestro pronóstico de crecimiento del 2% para 2020, aunque esto se ve atenuado por la posibilidad de endurecimiento de las políticas debido a las preocupaciones sobre los excesos en los mercados de valores, el impacto de la imposición rde nuevas restricciones por la Covid-19 en destinos de exportación y el efecto negativo de un mayor deterioro de las relaciones con los Estados Unidos», advirtió.
Por otra parte el comercio minorista Chino cayó en el primer trimestre de 2020 en un 11,4% respecto de la primera mitad de 2019.