El presidente estadounidense Donald Trump anunció el jueves 25 de septiembre una nueva batería de aranceles que incluye gravámenes del 100% a productos farmacéuticos importados, del 50% a gabinetes de cocina y tocadores de baño, del 30% a muebles tapizados y del 25% a camiones pesados, medidas que entrarán en vigor el 1 de octubre y generan incertidumbre en los mercados globales.

Medicamentos en el centro de la disputa comercial

La medida más significativa apunta al sector farmacéutico, donde Estados Unidos importó casi 233.000 millones de dólares en productos medicinales durante 2024. Trump estableció que el arancel del 100% se aplicará «a cualquier producto farmacéutico de marca o patentado, a menos que una empresa esté construyendo su planta de fabricación farmacéutica en Estados Unidos».

Esta decisión impacta directamente a la industria farmacéutica global, considerando que aproximadamente el 60% de las importaciones farmacéuticas estadounidenses en 2024 provinieron de la Unión Europea, mientras que Suiza representó el 9% y Japón exportó productos por valor de 2.500 millones de dólares.

Pascal Chan, vicepresidente de la Cámara de Comercio Canadiense, advirtió que las medidas arancelarias «podrían perjudicar la salud de los estadounidenses con aumentos inmediatos de precios, sistemas de seguros sobrecargados, escasez hospitalaria y el riesgo real de que los pacientes racionen o renuncien a medicamentos esenciales».

Reacción inmediata de los mercados asiáticos

Los mercados asiáticos registraron caídas significativas tras el anuncio. Las acciones farmacéuticas indias experimentaron una pérdida del 2%, siendo especialmente afectadas Sun Pharmaceutical Industries, que cayó aproximadamente 3%, y Laurus Labs, que registró la mayor caída con cerca del 6%.

En el mercado japonés, Sumitomo Pharma se desplomó más de 5%, mientras que el índice australiano CSL alcanzó su mínimo en seis años. El índice Hang Seng Biotech de Hong Kong bajó alrededor del 2,5%, y un índice que rastrea a fabricantes de muebles chinos cayó 1,1%.

Sectores industriales bajo presión arancelaria

Más allá de los medicamentos, Trump justificó los aranceles del 25% a camiones pesados «por muchas razones, pero sobre todo, por propósitos de seguridad nacional», con el objetivo de proteger a fabricantes estadounidenses como Peterbilt, Kenworth, Freightliner y Mack Trucks.

Los aranceles del 50% a gabinetes de cocina y tocadores de baño, junto con el 30% a muebles tapizados, buscan frenar «la avalancha masiva de estos productos en Estados Unidos desde otros países», según declaraciones del mandatario.

Contexto económico y política monetaria

Estas medidas se anuncian en un momento de recuperación económica, con el PIB estadounidense creciendo 3,3% en el segundo trimestre tras una contracción del 0,6% en el primer trimestre. Sin embargo, la inflación anual alcanzó el 2,9% en los últimos doce meses, contradiciendo la afirmación de Trump de que «no hay inflación».

El presidente criticó duramente la política de Jerome Powell, presidente de la Reserva Federal, argumentando que las tasas de interés «son demasiado altas» y atribuyendo parte de los problemas económicos a la «incompetencia» del funcionario.

La Oficina de Estadísticas Laborales reportó el recorte de 42.000 empleos en el sector manufacturero y 8.000 en construcción desde abril, mientras que entre 2021 y 2023, la economía estadounidense generó cerca de 400.000 empleos mensuales en promedio.

Respuesta diferenciada de la industria

Las empresas farmacéuticas estadounidenses y europeas mantuvieron un comportamiento más estable en los mercados. Las acciones de Eli Lilly, Amgen y Bristol Myers Squibb subieron entre 1% y 2%, mientras que Merck experimentó un ligero aumento.

Akash Tewari, analista de Jefferies, comentó que «en general, esto es una victoria para la industria farmacéutica y no debería tener un impacto material, considerando que la mayoría de las empresas ya anunciaron que están construyendo instalaciones de producción en Estados Unidos».

Múltiples farmacéuticas globales han anunciado planes de inversión multimillonarios en Estados Unidos este año, incluyendo AstraZeneca, Roche, Eli Lilly & Co, Johnson & Johnson, Novartis y Sanofi.

Implicaciones para acuerdos comerciales existentes

La implementación de estos aranceles plantea interrogantes sobre los acuerdos comerciales vigentes. La Unión Europea mantiene un acuerdo que establece un arancel del 15% sobre bienes, incluidos productos farmacéuticos, mientras que Japón cuenta con un acuerdo que garantiza que sus tasas arancelarias no superarán las de otros socios.

Mark Butler, ministro de Salud de Australia, declaró que su gobierno está trabajando para «comprender las implicaciones de los aranceles injustos e injustificados tras 20 años de libre comercio», considerando que Australia vendió alrededor de 1.370 millones de dólares en medicamentos a Estados Unidos el año pasado.

Estrategia arancelaria como herramienta política

La administración Trump ha abierto una docena de investigaciones sobre las consecuencias para la seguridad nacional de importaciones en sectores como turbinas eólicas, aviones, semiconductores, polisilicio, cobre, madera y minerales críticos, que servirán de base para nuevos aranceles.

El secretario del Tesoro, Scott Bessent, afirmó que Washington podría recaudar 300.000 millones de dólares para finales de año mediante estas medidas arancelarias, consolidando los gravámenes como herramienta clave de política exterior para renegociar acuerdos comerciales y ejercer presión política sobre otros países.

Futuro de la industria y mercado

Los analistas señalan que la construcción y certificación de nuevas plantas en Estados Unidos podría tomar al menos cinco años, sin considerar posibles problemas en la cadena de suministro o escasez de mano de obra. Una fuente de una farmacéutica taiwanesa advirtió que «los mayores perjudicados serán, en última instancia, quienes necesitan medicamentos».

El grupo industrial Pharmaceutical Research and Manufacturers of America afirmó que las empresas «siguen anunciando cientos de miles de millones en nuevas inversiones estadounidenses», pero alertó que «los aranceles ponen en riesgo esos planes».

La incertidumbre persiste sobre el alcance real de estas medidas, especialmente considerando que muchos fabricantes asiáticos se enfocan en genéricos y que Europa y Japón podrían verse protegidos por acuerdos comerciales existentes, aunque los representantes del sector señalan que esto aún no está completamente clarificado.