Un equipo de científicos ha desarrollado una tecnología que permite transcribir conversaciones telefónicas utilizando radares de ondas milimétricas y modelos de inteligencia artificial, exponiendo una posible amenaza para la privacidad en comunicaciones móviles. Investigadores de la Universidad Estatal de Pensilvania, liderados por Suryoday Basak, demostraron que este método, llamado mmWave-Whisper, convierte las diminutas vibraciones de un teléfono móvil en texto, sin interferencia de ruidos externos. El sistema emplea radares que operan en el rango de 77 a 81 GHz para capturar vibraciones de solo 7 micrómetros, a una distancia de hasta 125 centímetros. Esta innovadora pero inquietante técnica implica riesgos a la privacidad y plantea el debate sobre cómo prevenir el espionaje digital.
El mmWave-Whisper funciona mediante la emisión de pulsos de ondas electromagnéticas y la detección de las vibraciones reflejadas en el teléfono al reproducir audio, lo que permite captar minúsculos movimientos generados por el altavoz del dispositivo. Estas vibraciones luego son interpretadas y convertidas en texto por el modelo de IA Whisper, adaptado especialmente para este proyecto. Aunque la calidad del audio capturado es baja y contiene ruido, el sistema ha alcanzado una precisión del 44,74 % en palabras y del 62,52 % en caracteres, un nivel de precisión que, si bien está lejos de ser perfecto, plantea riesgos para la confidencialidad de las conversaciones.
Para mejorar la precisión, los investigadores aplicaron técnicas de corrección de errores estadísticos y seguimiento de variaciones de fase en la señal del radar. Estas estrategias ayudan a reducir el ruido y permitir una interpretación más clara de las señales, facilitando la transcripción. Los resultados de este sistema representan un avance significativo en espionaje de audio, que hasta ahora se había limitado a vocabularios reducidos o entornos específicos de laboratorio.
El uso de esta tecnología podría permitir la captura de palabras y frases aisladas, lo cual es especialmente preocupante en contextos en los que se maneja información sensible, como datos financieros o personales. Si bien las limitaciones actuales impiden una captura precisa y constante de conversaciones completas, el desarrollo de esta tecnología plantea nuevos desafíos en materia de privacidad.
Para protegerse de estos posibles ataques, expertos sugieren el uso de blindaje en teléfonos móviles para minimizar las vibraciones en los altavoces, además de posibles tecnologías de interferencia que bloqueen el acceso de radares a la detección de conversaciones. Este tipo de medidas podría ser clave para evitar futuras vulneraciones de seguridad a medida que el desarrollo de radares e IA continúa expandiéndose.
El avance en esta técnica sugiere una nueva era de vigilancia encubierta en el ámbito digital, y aunque actualmente presenta limitaciones, es claro que plantea una creciente preocupación para la privacidad en las comunicaciones móviles.