El fabricante estadounidense de equipos informáticos HP ha anunciado un plan de reestructuración que contempla la eliminación de entre 4.000 y 6.000 puestos de trabajo hasta el año fiscal 2028, una medida que busca reemplazar funciones tradicionales con herramientas de inteligencia artificial y generar ahorros operativos significativos en un contexto de márgenes cada vez más ajustados y transformación acelerada del sector tecnológico.

La decisión, comunicada tras la publicación de los resultados del cuarto trimestre fiscal, representa el segundo programa de reducción de costos de esta magnitud implementado por la compañía en menos de tres años y refleja la presión estructural que enfrentan los fabricantes de hardware en un mercado donde la demanda de equipos tradicionales se ha estancado y la competencia por liderar la transición hacia soluciones basadas en inteligencia artificial se intensifica.

Automatización masiva en áreas clave de operación

El director ejecutivo Enrique Lores explicó que la empresa desplegará soluciones de inteligencia artificial en departamentos estratégicos como desarrollo de productos, atención al cliente, ventas y fabricación. Según las proyecciones corporativas, esta transformación tecnológica permitirá alcanzar un ahorro bruto de 1.000 millones de dólares anuales al finalizar 2028, aunque el proceso requerirá una inversión inicial estimada en 650 millones de dólares.

De este monto, 250 millones de dólares se registrarán durante el año fiscal 2026, que comenzó el 1 de noviembre. La plantilla actual de HP asciende a aproximadamente 58.000 empleados, lo que significa que los recortes proyectados podrían afectar entre el 7% y el 10% de la fuerza laboral total de la compañía.

La automatización se concentrará principalmente en tareas repetitivas y procesos que pueden ser optimizados mediante algoritmos de aprendizaje automático, una estrategia que responde tanto a imperativos de eficiencia como a la necesidad de competir con rivales que ya han avanzado en la integración de capacidades de inteligencia artificial en sus dispositivos y operaciones.

Proyecciones financieras por debajo de las expectativas del mercado

A pesar de que HP reportó ingresos superiores a lo esperado en su cuarto trimestre fiscal —con ventas totales de 14.600 millones de dólares, un crecimiento del 4,2% interanual—, las proyecciones para el próximo ejercicio generaron inquietud entre analistas e inversionistas.

La empresa estima ganancias anuales, excluyendo partidas extraordinarias, de entre 2,90 y 3,20 dólares por acción, cifra notablemente inferior a los 3,32 dólares que preveía el consenso del mercado. Para el periodo que concluye en enero, HP proyecta ganancias por acción de entre 0,73 y 0,81 dólares, frente a los 0,78 dólares estimados por los analistas.

Esta divergencia entre los resultados trimestrales sólidos y las perspectivas conservadoras obedece en gran medida al incremento sostenido en los costos de los chips de memoria, componentes esenciales para la fabricación de computadoras cuyo precio ha experimentado aumentos significativos en los últimos meses. Aunque la unidad de computadoras personales de HP registró un crecimiento del 8% en ventas durante el último trimestre —impulsado por la migración a Windows 11 y el interés inicial en equipos con funciones de inteligencia artificial—, los márgenes de beneficio se han visto presionados por el encarecimiento de insumos críticos.

Lores indicó que la compañía cuenta con inventario suficiente para mitigar parcialmente este impacto durante la primera mitad del año fiscal 2026, pero advirtió que adoptará un enfoque más prudente para el segundo semestre, que incluirá la diversificación de proveedores, la reducción del volumen de memoria en determinados productos y ajustes estratégicos de precios.

Resultados mixtos entre unidades de negocio

El desempeño financiero de HP durante el último trimestre evidenció dinámicas divergentes entre sus principales líneas de negocio. Mientras la división de computadoras personales experimentó un repunte notable, la unidad de impresoras continúa enfrentando desafíos estructurales que no han podido revertirse.

La unidad de impresoras registró una caída del 4% en ventas durante el cuarto trimestre fiscal, con ingresos de 4.270 millones de dólares. Este retroceso se enmarca en una tendencia de largo plazo caracterizada por la reducción progresiva de la demanda de equipos de impresión tradicionales, especialmente en segmentos de consumo, donde la digitalización de documentos y el trabajo remoto han modificado sustancialmente los patrones de uso.

Por el contrario, la división de PC mostró signos de recuperación impulsados por dos factores principales: el ciclo de actualización corporativa vinculado al fin del soporte técnico para versiones anteriores de Windows y el interés emergente en equipos con capacidades de procesamiento de inteligencia artificial integrada. No obstante, este crecimiento ocurre en un mercado global de computadoras personales que permanece significativamente por debajo de los volúmenes registrados durante el auge pandémico de 2020 y 2021.

Segunda ronda de ajustes en menos de tres años

El anuncio actual no representa la primera iniciativa de reducción de costos implementada por HP en el periodo reciente. En febrero de 2025, la empresa reveló planes para eliminar entre 1.000 y 2.000 empleos antes del cierre de su año fiscal 2025, con el objetivo de generar ahorros por 300 millones de dólares.

Tres años antes, HP había ejecutado un programa similar que contempló la supresión de entre 4.000 y 6.000 puestos de trabajo cuando la plantilla ascendía a aproximadamente 61.000 empleados. Aquel plan permitió un ahorro bruto de 2.200 millones de dólares y sentó un precedente para las estrategias de optimización que la empresa continúa implementando.

La reiteración de estas medidas refleja la presión constante sobre HP para adaptarse a las transformaciones del mercado tecnológico global, caracterizado por la consolidación de competidores, la aceleración de ciclos de innovación y la creciente exigencia de los inversionistas por resultados financieros que demuestren eficiencia operativa y retornos sostenibles.

Reacción del mercado y deterioro del valor accionario

La respuesta de los mercados financieros al anuncio fue inmediata y negativa. Las acciones de HP experimentaron una caída cercana al 4% en la sesión extendida posterior a la publicación de resultados, después de cerrar a 24,32 dólares en la Bolsa de Nueva York. En lo que transcurre del año 2025, el valor de la acción ha descendido un 25% antes de la divulgación de estos últimos datos financieros.

Este deterioro en la valoración bursátil evidencia el escepticismo de los inversionistas respecto a la capacidad de HP para ejecutar exitosamente su transformación estratégica en un entorno altamente competitivo. La combinación de proyecciones financieras conservadoras, costos de reestructuración elevados y márgenes bajo presión genera incertidumbre sobre los plazos y la magnitud de los beneficios que la apuesta por la inteligencia artificial podría materializar.

Estrategias complementarias frente a desafíos operativos

Más allá de los recortes de personal, HP ha adoptado diversas iniciativas para enfrentar los retos económicos actuales. Una de las más significativas ha sido la reubicación de plantas de fabricación fuera de China para la mayoría de los productos destinados al mercado norteamericano, decisión orientada a reducir la exposición a riesgos arancelarios y tensiones geopolíticas que podrían afectar las cadenas de suministro.

La empresa también ha intensificado la búsqueda de nuevos proveedores de componentes críticos, particularmente memoria, con el propósito de reducir la dependencia de un número limitado de fabricantes y mejorar su poder de negociación en un mercado caracterizado por la volatilidad de precios. Adicionalmente, HP está explorando modificaciones en el diseño de ciertos productos que permitan reducir las especificaciones de memoria sin comprometer significativamente la experiencia del usuario, una estrategia que podría aliviar parcialmente la presión sobre los márgenes.

Contexto de despidos masivos en la industria tecnológica

Los recortes anunciados por HP se inscriben en una tendencia más amplia que está reconfigurando el panorama laboral del sector tecnológico a nivel global. Según datos del rastreador especializado layoffs.fyi, en lo que transcurre de 2025 han sido despedidas 114.124 personas en esta industria a escala mundial, afectando a más de 230 compañías.

Firmas como Amazon, Microsoft y Salesforce encabezan los mayores números absolutos de eliminación de puestos, aunque el fenómeno alcanza también a proveedores de hardware, servicios en la nube, plataformas de software empresarial y compañías de ciberseguridad. Este proceso refleja cambios estructurales profundos en la industria: rediseño de plantillas priorizando inversión en inteligencia artificial, automatización de funciones operativas, consolidación de líneas de negocio y ajustes posteriores a la expansión acelerada experimentada durante la pandemia.

Expertos del sector coinciden en que estas reducciones responden a una transformación sistémica y no a un fenómeno coyuntural. La inteligencia artificial generativa está acelerando la optimización de equipos de trabajo, mientras que los inversionistas demandan mayor disciplina financiera y mejores márgenes operativos en un entorno donde las tasas de interés permanecen elevadas y el acceso al capital de riesgo se ha tornado más restrictivo.

Desafíos estructurales del mercado de computadoras personales

El contexto en el que HP ejecuta su reestructuración está marcado por la debilidad persistente del mercado global de computadoras personales. Según datos de la consultora IDC, el mercado global de PC disminuyó más del 14% durante 2023, y aunque se espera una recuperación gradual hacia 2025 impulsada por equipos con capacidades de inteligencia artificial, el volumen de ventas aún está lejos de los niveles registrados antes de la pandemia.

Los ciclos de renovación de equipos se han extendido significativamente, especialmente en segmentos corporativos donde las restricciones presupuestarias han llevado a las empresas a prolongar la vida útil de sus dispositivos existentes. Esta dinámica reduce la frecuencia de compra y aumenta la competencia por una base de clientes que evalúa con mayor detenimiento cada inversión en tecnología.

Para HP, tradicionalmente asociada al hardware de cómputo, este entorno representa un desafío existencial que requiere no solo eficiencia operativa sino también innovación acelerada en productos y servicios que justifiquen la renovación de equipos y la captación de nuevos usuarios.

Apuesta por la inteligencia artificial como vía de crecimiento

A pesar del panorama desafiante, HP identifica en la integración de inteligencia artificial en notebooks y equipos empresariales una de las principales oportunidades para reposicionarse en el mercado. La denominada nueva generación de AI PCs representa un segmento emergente que podría generar un repunte en la demanda tanto corporativa como de consumidores individuales.

Estos dispositivos incorporan procesadores especializados o unidades aceleradoras de inteligencia artificial que permiten ejecutar modelos de aprendizaje automático localmente, ofreciendo funciones avanzadas de productividad, seguridad mejorada y automatización de tareas sin depender exclusivamente de la conectividad a la nube. Según proyecciones de la consultora Canalys, para 2027 más del 60% de todas las computadoras portátiles vendidas en el mercado incluirán este tipo de capacidades.

Este potencial crecimiento explica por qué HP y sus competidores están reorganizando sus plantillas, redirigiendo inversiones y acelerando ciclos de desarrollo de productos. La compañía busca posicionarse como un actor relevante en este segmento antes de que se consolide la ventaja competitiva de rivales como Lenovo, Dell y Apple, que también han intensificado sus esfuerzos en este ámbito.

Riesgos reputacionales y desafíos de gestión interna

Los ajustes laborales de esta magnitud representan desafíos significativos más allá de las consideraciones financieras inmediatas. Para una compañía con una fuerza laboral global estimada en más de 55.000 personas, recortar hasta 6.000 empleados implica riesgos en la moral interna, la retención de talento crítico y la percepción pública de la marca.

La implementación de estos recortes requerirá una comunicación cuidadosa tanto con los empleados afectados como con aquellos que permanecerán en la organización. La dirección de HP enfrenta la tarea de mantener el compromiso y la productividad de sus equipos en un contexto de incertidumbre, mientras ejecuta simultáneamente una transformación tecnológica compleja que demanda nuevas capacidades y formas de trabajo.

Adicionalmente, la narrativa de reemplazar empleados con inteligencia artificial puede generar cuestionamientos sobre la responsabilidad social corporativa de HP y su compromiso con las comunidades donde opera, especialmente en un momento en que el debate público sobre el impacto laboral de la automatización se intensifica en múltiples economías.

La capacidad de HP para navegar exitosamente estos desafíos determinará no solo el éxito financiero de su estrategia de reestructuración, sino también su posición competitiva de largo plazo en una industria donde la innovación tecnológica debe equilibrarse con consideraciones éticas, sociales y de sostenibilidad empresarial.