El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha expresado una profunda preocupación por el panorama económico mundial, marcado por la guerra comercial iniciada por Donald Trump y agravado por conflictos geopolíticos como los de Ucrania y Gaza. En un reciente informe, el organismo alerta sobre los riesgos que estas tensiones representan para los mercados financieros globales, anticipando una revisión a la baja de las previsiones de crecimiento en sus próximas reuniones en Washington.
El riesgo geopolítico y su impacto en los mercados financieros
El informe de Estabilidad Financiera Global del FMI dedica un apartado específico al análisis de las tensiones comerciales entre Estados Unidos y China, utilizando como referencia la guerra comercial de 2018. Según el estudio, estas tensiones golpearon significativamente las cotizaciones empresariales en ambos países, afectando tanto a las compañías directamente involucradas como a otros sectores.
«El riesgo geopolítico puede manifestarse en forma de tensiones comerciales. Aunque las medidas relacionadas con el comercio no están necesariamente asociadas al riesgo geopolítico, las tensiones comerciales, como los aranceles, las guerras comerciales y las sanciones, podrían imponerse por razones geopolíticas y afectar a las relaciones internacionales y a la actividad económica», señala el documento.
El FMI destaca que existe un efecto de retroalimentación negativa debido a:
- La anticipación de aranceles de represalia
- La interconexión empresarial a través de ingresos y cadenas de suministro
- El impacto potencial en la demanda agregada
- Un aumento general de la incertidumbre y aversión al riesgo entre inversores
Impacto diferenciado de los conflictos militares
El organismo internacional también pone especial énfasis en los efectos de los conflictos militares sobre la economía mundial. Según su análisis, mientras que las acciones bursátiles suelen tener una reacción moderada ante la mayoría de eventos geopolíticos, los conflictos armados provocan efectos «desproporcionadamente mayores y más persistentes en los precios de los activos».
Los datos muestran que los eventos de gran riesgo, como guerras o tensiones diplomáticas, reducen las cotizaciones bursátiles un promedio mensual del 1% a nivel global, con una caída media del 2,5% para los mercados emergentes. Los conflictos militares internacionales, como la invasión rusa de Ucrania, resultan particularmente destructivos, provocando una caída promedio mensual del 5% en las bolsas.
Volatilidad reciente en los mercados
La reciente oleada de volatilidad en Wall Street, la más pronunciada desde la pandemia de COVID-19, ilustra las preocupaciones del FMI. El índice Standard & Poor’s 500 ha descendido más de un 10% desde que Trump asumió el cargo el 20 de enero de 2025, mientras que el oro ha alcanzado máximos históricos. Paralelamente, una encuesta entre consumidores estadounidenses ha revelado que los temores a la inflación han llegado a su nivel más alto desde 1981.
Recomendaciones del FMI ante la creciente inestabilidad
El FMI ha formulado una serie de recomendaciones dirigidas a diferentes actores económicos para mitigar los riesgos derivados de la actual situación:
Para instituciones financieras:
- Considerar las implicaciones de los riesgos geopolíticos en sus operaciones
- Dedicar recursos adecuados a la identificación, cuantificación y gestión de estos riesgos
- Mantener colchones de capital y liquidez suficientes para absorber pérdidas extremas pero plausibles
Para reguladores y supervisores:
- Incorporar los riesgos geopolíticos en los test de estrés
- Integrarlos junto a los riesgos tradicionales de mercado, crédito y liquidez
Para mercados emergentes y economías en desarrollo:
- Continuar esfuerzos para profundizar los mercados financieros
- Desarrollar marcos regulatorios sólidos que ayuden a los inversores a gestionar los riesgos
Para todas las economías:
- Mantener un espacio de política macroeconómica adecuado
- Asegurar reservas internacionales suficientes para mitigar efectos adversos
Nuevo programa de financiación para Argentina
En paralelo a estas advertencias, el FMI aprobó el pasado 11 de abril un nuevo programa de financiación para Argentina valorado en 20.000 millones de dólares a 48 meses. El acuerdo contempla un desembolso inicial de 12.000 millones de dólares, que estarán disponibles desde el próximo martes, y otros 2.000 millones adicionales en junio.
El programa busca apoyar «la transición a una nueva fase» que crear «una economía más abierta y orientada al mercado» en Argentina. Entre los pilares del acuerdo se incluyen:
- Mantener una fuerte ancla fiscal
- Transitar hacia un régimen monetario y cambiario más robusto
- Implementar mayor flexibilidad cambiaria
Como parte de estas medidas, el banco central argentino anunció que permitirá que el peso fluctúe libremente dentro de una banda móvil entre 1.000 y 1.400 pesos por dólar, frente a los 1.074 al cierre del viernes. Asimismo, se eliminarán gran parte de los controles de capital que restringían el acceso a moneda extranjera.
Sin embargo, el propio informe del personal del FMI advierte que «los riesgos a la baja siguen siendo elevados», ya que la implementación del programa podría verse comprometida por las crecientes tensiones comerciales mundiales y, a nivel interno, por la volatilidad del próximo ciclo electoral y las frágiles condiciones sociales en Argentina.
Perspectivas para las reuniones del FMI
Las próximas reuniones del FMI en Washington, programadas para la semana del 21 de abril, estarán dominadas previsiblemente por los anuncios de aranceles de Trump y sus implicaciones para la economía global. Se espera que la directora gerente del FMI, Kristalina Georgieva, abunde en la idea de evitar medidas que puedan perjudicar aún más a la economía mundial en su discurso inaugural.
El panorama económico global se presenta así enormemente complejo, con una combinación de riesgos geopolíticos en niveles históricamente altos y tensiones comerciales crecientes que amenazan la estabilidad de los mercados financieros y el crecimiento económico mundial en un momento particularmente vulnerable.