El gobierno de Trump intensifica esfuerzos para desmantelar los mecanismos de financiación del grupo terrorista en Sudamérica
El Departamento de Estado de los Estados Unidos ha puesto en marcha una iniciativa de gran envergadura contra las operaciones financieras de Hezbollah en América Latina, ofreciendo una recompensa de hasta 10 millones de dólares por información que permita interrumpir las redes económicas de la organización terrorista en la región de la Triple Frontera entre Argentina, Brasil y Paraguay.
Una red de financiación criminal diversificada
Según el comunicado oficial emitido por el Departamento de Estado, los operadores financieros de Hezbollah en la Triple Frontera utilizan una amplia gama de actividades ilícitas para generar ingresos que posteriormente son canalizados hacia la organización. Entre estas actividades destacan:
- Lavado de dinero a través de empresas pantalla
- Narcotráfico regional e internacional
- Contrabando de carbón y petróleo
- Comercio ilegal de diamantes
- Contrabando de bienes como dinero en efectivo, cigarrillos y artículos de lujo
- Falsificación de documentos oficiales
- Producción y distribución de dólares estadounidenses falsificados
Adicionalmente, el gobierno estadounidense ha identificado que Hezbollah utiliza actividades comerciales aparentemente legítimas en toda América Latina como mecanismos de financiación, entre ellas negocios de construcción, operaciones de importación y exportación de mercancías, y transacciones inmobiliarias.
Un programa de recompensas con alcance internacional
La iniciativa forma parte del programa Recompensas por la Justicia (RFJ, por sus siglas en inglés), administrado por el Servicio de Seguridad Diplomática de los Estados Unidos. Este programa busca obtener información crítica que permita:
- Identificar donantes y facilitadores financieros de Hezbollah
- Descubrir instituciones financieras o casas de cambio que faciliten transacciones para la organización
- Detectar empresas o inversiones controladas por Hezbollah o sus operadores
- Localizar empresas pantalla involucradas en la adquisición de tecnología de doble uso
- Desmantelar esquemas delictivos que generen beneficios económicos para el grupo terrorista
«En la Triple Frontera, los financistas y facilitadores de Hezbollah generan ingresos para la organización terrorista mediante actividades ilícitas como el lavado de dinero, el narcotráfico, el contrabando de carbón y petróleo, el comercio ilegal de diamantes, el contrabando de bienes, la falsificación de documentos y la falsificación de dólares estadounidenses», indicó el comunicado oficial.
Hezbollah: una organización con recursos millonarios
De acuerdo con los datos proporcionados por el Departamento de Estado, Hezbollah genera aproximadamente mil millones de dólares anuales a través de múltiples fuentes:
- Apoyo financiero directo de Irán
- Negocios e inversiones internacionales
- Redes de donantes en diversos países
- Esquemas de corrupción institucional
- Actividades sofisticadas de lavado de dinero
La organización, con base en el Líbano, fue designada como Organización Terrorista Extranjera por Estados Unidos en 1997 y como Terrorista Global Especialmente Designado en 2001. Según Washington, Hezbollah recibe armas, entrenamiento y financiamiento de Irán, país que ha sido catalogado como patrocinador estatal del terrorismo desde 1984.
Canales confidenciales para la colaboración
Las autoridades estadounidenses han establecido diversos canales de comunicación para recibir información relevante sobre las operaciones financieras de Hezbollah en la Triple Frontera. Cualquier persona con datos pertinentes puede comunicarse con el programa Recompensas por la Justicia a través de aplicaciones de mensajería segura como Signal, Telegram o WhatsApp, utilizando el número +1-202-702-7843.
El Departamento de Estado garantiza la confidencialidad absoluta de todas las comunicaciones y de la identidad de los informantes. Este compromiso con la protección de fuentes ha sido fundamental para el éxito del programa RFJ, que desde su creación en 1984 ha pagado más de 250 millones de dólares a más de 125 personas en todo el mundo por proporcionar información crucial para neutralizar amenazas contra la seguridad nacional estadounidense.
Una estrategia regional contra el terrorismo
Esta iniciativa se enmarca en los esfuerzos continuados del gobierno de Donald Trump para combatir el financiamiento del terrorismo a nivel global, con un enfoque particular en desarticular las operaciones de Hezbollah en América Latina. La Triple Frontera ha sido identificada durante décadas como un punto estratégico para las actividades ilícitas de diversas organizaciones criminales y terroristas debido a las complejidades jurisdiccionales y los desafíos de coordinación entre los tres países que la conforman.
El programa de recompensas busca aprovechar el conocimiento local y las redes de información en Argentina, Brasil y Paraguay para identificar y desmantelar las estructuras financieras que sostienen las operaciones de Hezbollah en la región, lo que representa un enfoque colaborativo para abordar una amenaza que trasciende fronteras nacionales.
La medida subraya el compromiso del gobierno estadounidense de combatir el financiamiento del terrorismo y proteger la seguridad global, al tiempo que busca fortalecer la cooperación internacional en la lucha contra las organizaciones terroristas y sus redes de apoyo económico.