El gigante automotriz alemán BMW ha reportado un descenso del 1,4% en sus ventas globales durante el primer trimestre de 2025, con un total de 586.149 vehículos entregados en todo el mundo. Esta disminución se debe principalmente a la significativa caída del 17,2% en el mercado chino, su peor desempeño trimestral en ese país desde 2020.
Comportamiento mixto por mercados regionales
Las ventas de la marca principal BMW cayeron un 2% hasta las 520.142 unidades, mientras que Mini logró un crecimiento del 4,1%, alcanzando las 64.626 unidades vendidas. Por su parte, la exclusiva marca Rolls-Royce experimentó una contracción del 9,4%, con solo 1.381 vehículos comercializados.
El rendimiento por regiones muestra un panorama contrastado. Europa registró un sólido crecimiento del 6,2% en comparación con el mismo período del año anterior, mientras que el mercado estadounidense aumentó un 4,1%. Sin embargo, estos avances no lograron compensar la pronunciada caída en China, donde BMW enfrenta una feroz competencia de fabricantes locales como BYD, además de las consecuencias económicas derivadas de la crisis inmobiliaria en el país asiático.
En Alemania, mercado nacional del fabricante, las ventas también experimentaron una ligera contracción del 1,3%.
El auge de la electrificación como punto brillante
En medio de estos resultados mixtos, destaca el notable crecimiento en el segmento de vehículos eléctricos. A nivel global, BMW entregó 109.516 vehículos totalmente eléctricos entre sus marcas BMW, MINI y Rolls-Royce, lo que representa un aumento del 32,4% respecto al mismo período del año anterior. En Europa, el incremento fue aún más pronunciado, con un 64,2%.
«Uno de cada tres MINI vendidos en Europa y más de uno de cada dos vendidos en China fueron totalmente eléctricos», señaló Jochen Goller, miembro del Consejo de Administración de BMW responsable de clientes, marcas y ventas. «Nos sentimos confiados, gracias al significativo crecimiento de los nuevos pedidos en todas las tecnologías de propulsión, especialmente en nuestro mercado nacional de Alemania», añadió.
Desafíos para los fabricantes europeos en el mercado global
El informe de BMW refleja una tendencia que afecta a otros fabricantes europeos de alta gama. Mercedes-Benz registró una caída del 10% en China durante el primer trimestre, mientras que Volkswagen experimentó un desplome del 7,1% en ese mercado.
Los fabricantes europeos enfrentan múltiples desafíos en su transición hacia la movilidad eléctrica, incluyendo cambios en los objetivos de emisiones, insuficiencia de incentivos, competencia de rivales chinos con precios más competitivos y un despliegue de infraestructura de recarga más lento de lo previsto. Algunas marcas como Volvo y Porsche ya han suavizado sus objetivos en materia de vehículos eléctricos.
El impacto de las políticas comerciales de Trump
Los resultados anunciados por BMW corresponden al período previo a la entrada en vigor de los nuevos aranceles impuestos por la administración Trump. El presidente estadounidense introdujo la semana pasada un gravamen adicional del 25% sobre los automóviles importados, mientras que los aranceles sobre componentes automotrices entrarán en vigor el próximo 3 de mayo.
BMW ya ha advertido sobre el potencial impacto negativo de estas tensiones comerciales, estimando un golpe de aproximadamente 1.100 millones de dólares (987 millones de euros) en sus beneficios para este año.
Las opciones para los fabricantes son limitadas: absorber el costo adicional, suspender envíos al mercado estadounidense o trasladar la producción a EE.UU. Sin embargo, la volatilidad actual de las políticas comerciales y la amenaza de una posible recesión económica generan incertidumbre sobre la viabilidad de realizar inversiones significativas en nuevas instalaciones productivas.
Reacción del mercado bursátil
A pesar de los resultados mixtos, las acciones de BMW experimentaron un repunte de aproximadamente un 5% en la bolsa de Fráncfort, beneficiándose del optimismo general de los mercados tras el anuncio de Trump sobre la suspensión de algunos de los nuevos aranceles previstos. No obstante, el valor de las acciones de la compañía ha caído alrededor de un 38% en el último año.