El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) destacó que el desempeño socioeconómico reciente de Paraguay “es un buen ejemplo de los beneficios generados por una gestión fiscal responsable”.
Según un informe publicado en su página web, el BID asegura que Paraguay “demuestra a la región la importancia de tener un compromiso de largo plazo con la estabilidad macroeconómica y la modernización constante de la gestión fiscal, como uno de los pilares en el camino hacia el desarrollo sostenible”.
Por otra parte, manifiesta que el plan de recuperación socioeconómica implementado por el país es uno de los más grandes de la región, equivalente a 5,5% del Producto Interno Bruto (PIB) porcentaje muy superior al promedio de 3,2% de América Latina y el Caribe. Lo que contribuyó a que el Banco Central de Paraguay estime la contracción económica en 2020 en solo 1% del PIB, en relación con una caída estimada en 7,7% del PIB para la región.
Así también, se precisa que, aunque la deuda pública creció recientemente, se estima entre 33,5 y 33,8% del PIB, sigue siendo uno de los valores más bajos de la región.
Resaltan además las principales reformas llevadas a cabo que incluyen la aprobación en el Congreso de la Ley de Administración de Pasivos, el envío al Congreso del proyecto de Ley de Responsabilidad 2.0, la creación de una Comisión Técnica Económica Tributaria, la aprobación en el Congreso de cuatro leyes que fortalecen la transparencia tributaria, la creación y puesta en marcha del Sistema Integrado de Facturación Electrónica (SIFEN).
La creación de una Comisión Técnica de Gasto Público, la mejora de la gestión financiera pública y la transparencia fiscal a nivel nacional y municipal con la implementación del módulo de inventario inicial de bienes del Sistema Integrado de Administración de Recursos del Estado (SIARE), el lanzamiento del plan de acción de implementación de los programas de PPR en sectores prioritarios (educación, salud y protección social) y la probación y reglamentación de la Ley de Inversión Pública, son también otros puntos destacados.
Asimismo, indica que la gestión fiscal responsable ha contribuido a una mayor estabilidad económica, mejorando la resiliencia del país a choques económicos fuertes como el que se está enfrentado con la pandemia del Covid-19: la deuda pública de Paraguay ascendía a 22% del PIB en 2018, dotando al país de espacio fiscal para una fuerte respuesta contra cíclica en 2019 y especialmente en 2020.
Por otro lado, recuerda que en diciembre pasado, Paraguay completó con el BID un préstamo de reforma de políticas o PBL por sus siglas en inglés, que constituye un buen ejemplo del compromiso del Gobierno de Paraguay, a través de su Ministerio de Hacienda, con la estabilidad macroeconómica y la contribución de las finanzas públicas al desarrollo sostenible del país.