De acuerdo con proyecciones de la Agencia Internacional de la Energía (AIE), la demanda de energía se reducirá 5% este año, mientras que las emisiones manifestarían un 7% de reducción como consecuencia de la pandemia del covid-19.
Según la Agencia EFE, estas reducciones tendrían efectos duraderos y modificarían las tendencias para la próxima década, en la que se manifestaría un retroceso del carbón y el crecimiento del petróleo llegaría a su fin.
En su informe anual de perspectivas, la AIE presentó cuatro escenarios diferentes ante la gran incertidumbre sobre la recuperación y ante la posibilidad de generar políticas para acelerar la transición energética.